Del ruido, del bullicio, de colores, de olores, de sabores. Calles cargadas de música, de risas , de ires y venires frenéticos entre tráficos mañaneros.
De playas inmensas, arenas blancas y altos cocoteros. De negros brillantes que golpean tambores al ritmo de caderas provocadoras.
De carreteras interminables cargadas de verdes, de azules maravillosos, únicos.
De bramidos de animales que pastan a sus anchas y cabalgan a lomo de unos Llanos inmensos cargados de cuatro y maracas.
De aguinaldos y gaitas mágicas que nos traen ruido, saludos, abrazos y besos de familias que se aman en calles abiertas a los vecinos.
De amores caminados en el Parque de los Caobos y en el paseo de los Próceres. De cines cargados de cotufas y de risas compartidas.
De marchas estudiantiles reclamando mejoras que nunca llegan. De amores y desamores. De perritos calientes y buhoneros que pregonan chichas y conservas de colores.
Caracas única, Caracas mia que se me aleja envuelta en días de estudiante y amores primeros.
Volveré. Volveremos....
No hay comentarios:
Publicar un comentario